top of page
Ruth Axelrod

¿Qué tan codependiente eres?


La codependencia puede ser definida como esa característica de la personalidad que busca depender de otra persona, que muchas veces también es dependiente de la primera. Es decir, nos estamos refiriendo a una situación de dependencia mutua entre dos humanos que han llegado a no poder vivir sanamente estando juntos, pero simultáneamente tampoco están bien estando separados…ni contigo ni sin ti, diríamos comúnmente.

Toda relación humana requiere que los participantes puedan tener un grado necesario de apego, ese afecto que le permite a uno estar cerca, para desarrollar sentimientos de cariño, amor, ternura y sensualidad. Una pareja sin apego no estaría dispuesta a compartir y negociar, a tener metas en común y proyectos de familia. Pero el riesgo de la convivencia está, en este caso, en dejar de ser uno mismo para romper las barreras de la propia identidad y pedirle a la pareja que me dé la suya.

Es lo que románticamente pensamos que podría ser el estado ideal, que un enamorado busque el paraíso, loocking for paradise… Pegado a su amada, sin importar nada más que lo que ella desea, sólo en función del reconocimiento y valía que la mirada de la otra persona ofrece. ¿Y qué pasa cuando ella, o bien él, ya no puede ofrecer esta admiración?, ¿cuándo el amor va pasando a ser algo más real y menos ideal?, ¿de qué tamaño son las crisis de las parejas?

¿Es la dependencia un estado sano? ¿Pueden las personas desarrollarse bien dependiendo de los otros? La verdad es que es preferible saber estar con los demás sin necesariamente depender de ellos, sino en un grado de autoafirmación, de saber que quiere cada quien.

Parece que el amor se confundiría con la codependencia, pero son verdaderamente dos formas distintas de relacionarse. El primero genera alternativas de crecimiento y de seguridad para los miembros de esa pareja y el segundo, la codependencia, genera sentimientos de enojo, rabia, frustración, inseguridad, celos y muchos malos entendidos. Es una forma de agresión al vínculo amoroso, al estado de orden de una pareja.

Este tipo de violencia es silenciosa y difícil de entender, es violencia pasiva que genera que las personas involucradas se vuelvan en si intolerables y busquen salidas para sentir que pueden ser independientes y libres.

¿Qué tan lejos de esto se ve la elección de una infidelidad? ¿Sería esto una manera de expresar el conflicto que se vive internamente, de decirle sin palabras al cónyuge codependiente que algo en la relación de pareja está generando malestar?, ¿una forma de salida o de protesta?

Como es tan difícil de identificar, es muy difícil de expresar en palabras. Estamos más acostumbrados a actuar que a platicar, entonces de aquí también es muy fácil saltar a salidas como el alcohol o algún tipo de adicción que en sí es otra forma de seguir dependiendo de algo más, que no es uno mismo.

Cuídate y vale la pena que pongas atención en tu estilo de relación amorosa, ¿qué tan codependiente eres?

Siempre podemos mejorar…

*Las opiniones contenidas en este artículo son responsabilidad del autor.

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page